Ocurrió en la transmisión por el sorteo de cuartos de la Champions. Allí estaban los cuatro futbolistas de Shakhtar Donetsk, a la espera de conocer su rival. En la lista, aparecían Manchester United, Chelsea, Tottenham, Inter, Schalke 04, Real Madrid y Barcelona. Y les tocó, precisamente, enfrentar al Barça. El cruce menos deseado. De ahí la reacción Srna, Pyatov y Chyzov, intimidados por el alto vuelo futbolero de Messi y cía. Chygrynsky, último integrante del grupo, ni se inmutó. Aunque fue honestamente bruto. «Nos espera un partido muy difícil. Vamos a jugar contra el mejor equipo del mundo».

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