Santiago Tuñez Author
El antídoto de Chamartín
Por Geoff Hernández (@geoffhernandez)
1 – En la espalda de Ancelotti hay mucho peso, tanto como en el mítico recinto de Chamartín. Las noches son más oscuras, o quizá más blancas cuando el rugido merengue se despierta. La llegada de Al Capone sólo habrá valido la pena si terminan de romper la maldición de la décima. Esa gema valiosa que se le ha escondido al club español por más de ocho años. Esta vez vencieron, pero sinceramente no sé si eso significa que estén más cerca de alcanzar la gloria.
2- Desnaturalizarte para ganar. Es un concepto nuevo que pocos logran aceptar, pero que el hincha radical abraza. Eludir el espectáculo, y asegurar la victoria. Discutirle la posesión a los equipos de Guardiola es una estupidez. Nadie salió vivo cuando lo intentaron. Por eso Ancelotti decidió ceder protagonismo, y disfrutar de espacios, pocos, pero espacios al fin. Alonso fue el héroe de la noche. Lúcido, omnipresente, aguerrido. Recordando esa garra que lo llenó de gloria en el Liverpool. Le comió la costilla a Schweinsteiger y le obligó a realizar el peor partido en toda la temporada. Era el rastrillo de la mediacancha, arrasaba con todo. Isco volvió a tener otra de esas noches, donde el silencio y la ausencia de protagonismo lo llena de gloria. Esa pausa brutal que hace en los momentos de transición, ahora le vale al Madrid una Copa del Rey y medio pase a la final.
3 –Muchos son los recuerdos de Guardiola en el Bernabéu. Gloriosos y perfectos todos, hasta el de este cruce por las semis de la Champions League. Los primeros 15 minutos fueron una poesía, una asociación de escritores que postearon una historia maravillosa, pero sin un final feliz. Sólo restó el gol para aplaudir la perfección. Le secuestró, una vez más, el protagonismo en su casa al Madrid. Un mundano diría que de nada importa si pierdes, un filósofo pensará en el futuro y reflexionará. Noventa minutos en el Allianz Arena pareciera ser mucho tiempo.
4- Cristiano jugó, pero no compitió. Esto es logro absoluto del Bayern. El asesino de mira exquisita pudo haber liquidado la eliminatoria, y perdonó. En ocho días sabremos la repercusión de esa acción. Bale faltó, y en demasía. Karim sigue demostrando su genética goleadora en Champions y Di Maria, aunque no estuvo mágico como otras veces, respondió y sufrió en los repliegues. Continue Reading
La mirada del conductor
Cristian Savio es un jugador de alto vuelo en el grupo humano de este blog y el periodismo nuestro de cada día. Corre en búsqueda de personajes, une letras y diseña reportajes futboleros con una mirada interesante. Sus historias pueden leerse en la revista Newsweek. Y como suele ocurrir con los obreros de la tinta y el papel, varias partes quedan fuera de página por la falta de espacio o el corte de edición. Generoso, Cristian reparte ese juego hacia De Fútbol Somos. Así, los seguidores de este blog pudieron leer a Eduardo Sacheri, sobre el fin de la resistencia a Messi en la Selección y su amor hacia Independiente. Y también, un reportaje a Jorge Altamira, el referente histórico del Partido Obrero, que frenó su pasión política por un rato y le hizo espacio a su sentimiento por Huracán. Ahora, es tiempo de devolver gentilezas. Cristian entrevistó a Alejandro Sabella cuando restan menos de dos meses para el Mundial. El DT del seleccionado confesó sus ilusiones y temores. Analizó rivales. Encontró puntos de contactos con el equipo de Diego Maradona. Y advirtió: «El entrenador, en general, puede hacer más mal que bien». Lean aquí la entrevista completa.
- Foto de Jamie McDonald / Getty Images Europe vía Zimbio
El show no debió continuar
«Si quieren venir que vengan, les presentaremos batalla», desafió el dictador Leopoldo Galtieri desde los balcones de la Casa Rosada. Y su mensaje fue aplaudido por miles de cuerpos en la Plaza de Mayo. Aquel 2 de abril de 1982, la mayor parte de la sociedad apoyó el desembarco argentino en las Islas Malvinas. El fútbol nuestro también respaldó la estrategia infame de Galtieri y llamó Soberanía Argentina al torneo Metropolitano de aquel año. En los estadios, según recordó el periodista Ezequiel Fernández Moores, se quemaron banderas inglesas y los relatos del Mundial de España no mencionaban a Inglaterra por su nombre. «Avanza el equipo de camiseta blanca», indicaban en las transmisiones de radio y televisión. La pelota giró en todo momento y poco importaron los muertos por el conflicto del archipiélago. Durante la Copa del Mundo, la Selección salió a escena en todos sus partidos, pese a que el primo de Osvaldo Ardiles había muerto el 1° de mayo, al ser derribado su avión de la Fuerza Aérea. A 32 años del comienzo de la guerra, la AFA -dirigida por Grondona como en aquellos días- autorizó a que los equipos ingresen al césped portando una bandera con el mensaje Las Malvinas son Argentinas y se realice un minuto de silencio”. El homenaje futbolero a los veteranos y caídos en Malvinas no borra su actitud en tiempo de balas, bombardeos y víctimas. El show no debió continuar.
Decime qué se siente
Dirá la historia que una tarde de 2014, la del domingo 30 de marzo, River volvió a festejar en la Bombonera. El triunfo tomó forma después de casi diez años sin éxitos y dejó en el archivo aquel cabezazo goleador de Cavenaghi. El Millonario llegó poco en los 90 minutos y cobró en efectivo. Fue astuto para esperar los desacoples defensivos y las fallas de los xeneizes en la cancha de arriba. Y a la hora señalada, hizo clink caja y se quedó con el superclásico. Delirio de River en rodeo ajeno… y en estas declaraciones de Ramón Díaz y cía…
Era el momento justo, demostramos que el equipo está vivo. Sentimos mucha emoción. Tengo la suerte de que a veces me toca venir y ganarles» (Ramón Díaz).
«No nos bajoneamos como pasaba en algunos partidos y por eso llegamos al gol. Soy hincha de River y para mí es un premio doble» (Manuel Lanzini). Continue Reading
Lección de honor
El conteo regresivo se acerca a su momento final. Ya está, quedan pocas horas. Asoma el día del superclásico. Boca y River jugarán este domingo en la Bombonera. Los recuerdos vuelan en el inconsciente colectivo. Hay escenas de diferentes tiempos. La historia, claro, devuelve capítulos del siglo pasado. Y el primero de ellos, en el profesionalismo, se grabó allá por 1931. No existen registros fílmicos, pero así asoma la crónica de El Gráfico. Papeles arrugados y fotografías en cepia de un partido jugado en un “ambiente irregular y desagradable”. Leamos, pues, aquella lección de honor.
Muchos aficionados, ansiosos por no perder el plato fuerte que les ofrecía el clásico match ente Boca Juniors y River Plate, los tradicionales adversarios de la Boca y protagonistas del actual certamen de profesionales, fueron desde las 10 al field de Brandsen y Del Crucero, para tomar cómoda ubicación. El objeto del adelanto no era otro que ése, que no era posible suponer que lo constituía el deseo de sacarle el jugo a los cincuenta, viendo también los matches preliminares. Todo el interés radicaba en el partido principal y de ahí la molestia de la larga espera. Sin embargo, ese público estoico que arrostra cuanto obstáculo o contrariedad que se le presenta, con tal de satisfacer sus deseos, se vio defraudado, por cuanto de un espectáculo que se le prometía de hora y media, sólo presenció 25 minutos, sin que se le devolviera íntegramente o en parte proporcional el importe que abonó para ver un match entero. Continue Reading
El arte de liderar
«En el fútbol, como en la vida, hay que tener tres cosas: fe, suerte y coraje». Los flashes enfocaban el semblante de Diego Simeone por la conquista de la Copa América de 1993. Se lo veía agotado, pero satisfecho con la medalla sobre su pecho. Y comprendía, con sólo 23 años, las coordenadas del éxito en el mundo de la pelota. Hoy, dos décadas después de aquel mensaje, el Cholo ya no se mueve por la mitad de la cancha. Camina por el corralito de los DT. Es el hombre que maneja los hilos de Atlético de Madrid, después de haber sumado millas de entrenador en el torneo argentino y el calcio italiano. El Colchonero mira a todos desde arriba, junto con Real Madrid. El secreto está en su juego intenso y el liderazgo de Simeone. De este tema y otros del tablero verde, dialogó Jot Down Cultural Magazine. Aquí, cinco frases destacadas con tinta indeleble.
A mí nunca me gustó imponer el liderazgo, es algo que no se puede imponer. El liderazgo lo tienes o no lo tienes y en realidad te lo aceptan y te lo dan tus colegas y compañeros, ya sea en un equipo de fútbol, en el colegio, en la empresa o en un restaurante. Posiblemente siempre me gustó empujar, nunca me callé. Siempre busqué pelear contra el que sea, el poder o los humildes».
«Yo tengo una energía y vos podés tomarla o no tomarla, seguirme o no, pero no se puede explicar lo que hace un líder. O me sigues, o no me sigues. Yo no comparto que uno en el trabajo es de una manera y en la vida de otra. Vos sos de la misma manera siempre». Continue Reading
Mientras rodaba una pelota
Por Gabriel Tuñez (*)
“Fue el 24 de marzo de 1976. Lloré. Hace una semana no quería usar grandes palabras, ahora no las encuentro”. La frase parece un llamado triste ante el arribo al poder de la dictadura más sangrienta en la historia argentina. Pero no. Es el inicio de una crónica deportiva, de un partido de fútbol que el seleccionado argentino jugó el mismo día que Jorge Videla, Emilio Massera y Orlando Agosti tomaron por asalto el gobierno a sangre y fuego para comenzar un accionar asesino y represor que duraría hasta el regreso de la democracia en 1983.
El estadio de Slaski, en la ciudad polaca de Chorzow, fue el escenario de una victoria argentina que mereció las lágrimas del cronista de El Gráfico, la revista deportiva que abrió su edición con un editorial elogioso al “nuevo gobierno, que conmovió” al país. El fútbol, por sobre otros deportes, fue el principal instrumento que utilizó la dictadura para esconder sus crímenes, su economía corrupta, su censura y sus persecuciones. Continue Reading