Santiago Tuñez Author
El avión está en la pista y le pone temperatura a sus motores. Faltan pocos minutos para el despegue hacia el Mundial de Brasil. Y en una sala del aeropuerto de Montevideo, los corazones de un plantel aceleran sus latidos. Hay objetivos, ilusiones, sueños. Entonces, Obdulio Varela pone un freno a la expectativa y exige a sus compañeros que saluden a Matías González, el defensor que rompió la huelga organizada meses atrás por los futbolistas. “Si no hay unidad pueden jugar los mejores once del mundo que no le ganan a nadie”, dirá tiempo después Obdulio. El capitán uruguayo en el Mundial ’50. El capitán del Maracanazo. El capitán eterno. Continue Reading
Por Thiago Rabelo / Para The Guardian
Al igual que muchos otros jugadores y ex futbolistas, Juninho Pernambucano podría fácilmente guardar silencio y no discutir los temas más importantes de la vida. Pero eso, según el ex símbolo de Lyon e Internacional de Brasil, sería una traición a sus principios. Continue Reading
-Quedate, Carlos, hasta el 2000 si es necesario.
-No, Julio, muchas gracias. No puedo seguir al mando de la Selección. Ya dije que me iba, está decidido. No soy de volverme atrás.
En los cimientos del estadio de San Paolo, Bilardo festejaba el triunfo contra Italia por penales. Ni siquiera la propuesta irresistible de Grondona lograba sacarlo de foco. Sólo quería cristalizar sus palabras y, después de la segunda final al hilo ante Alemania, decir adiós. Y así lo hizo, nomás: el 8 de julio de 1990, hace hoy 30 años, dirigió por última vez al seleccionado argentino. Continue Reading
Por Leonardo Faccio
Unos días antes de que Messi cumpliera 23 años, la selección argentina era una de las favoritas del Mundial de Sudáfrica. Aunque no hacía goles, la superestrella del Barcelona destacaba en un equipo que avanzaba invicto. Dos días antes del partido con Grecia, Maradona llamó a Messi para decirle algo. Quería darle el brazalete de capitán.
-Esos dos días -me dice la Brujita Verón- vi a Leo nervioso por primera vez.
No era la responsabilidad del liderazgo lo que incomodaba a Messi. Lo que lo desvelaba era que tenía que dar un discurso ante sus compañeros. Continue Reading
Por Santiago Tuñez
¿Destino, suerte o casualidad? En una calle de Limón, la capital de la cultura afro-caribeña de Costa Rica, un hombre de piel cobriza sonríe en el mano a mano con el habitante común. Le recuerdan aquel jaque mate en el arco, escuchan sus palabras en la cornisa de la emoción y lo abrazan con agradecimiento, orgullo, satisfacción. Los más chicos, tímidos y extrañados, cumplen el pedido de sus padres y saludan al dueño de la escena con un apretón de manos. Entienden, por el relato, que no es alguien más. Hay historia a su alrededor. Leyenda. Juan Cayasso se siente feliz con la proyección del pasado y el reconocimiento del presente. Es un combustible en su cuerpo. Por eso, enciende el motor y camina por la ciudad costera, pero algo incomoda su recorrido. Es aquella pregunta que lo persigue desde hace largo rato. Desde un verano italiano. Continue Reading
Por Santiago Tuñez
Cuesta encontrar imágenes de la cuarentena y ubicarlas en su línea de tiempo. Falta memoria y precisión. Sobra desgaste y confusión mental. El ejercicio es más simple en un viaje al pasado. Y más aún cuando la propuesta es evocar el Mundial de Italia ’90. Se abre el archivo cerebral y, de pronto, emergen goles, jugadas, sonidos. Cada recuerdo cae en el casillero justo. Poco importa que haya sido la Copa del Mundo con peor promedio de gol de la historia. Aquel torneo fue un rótulo en una generación de argentinos. Y 30 años después, permanece intacto en el inconsciente colectivo. Continue Reading
“Esa noche, Riquelme era arte premoderno: pisadas, amasadas, amagues, toques -escribió Martín Caparrós en el libro Boquita-. En un momento se llevó a Yepes contra la raya derecha, cerca de la mediacancha, y lo retó a que se la sacara. Yepes se le fue al humo…” Continue Reading
Por Santiago Tuñez
Mayo de 1980. La dictadura recorre el cuarto año en el poder y su puño de hierro golpea con fuerza en la sociedad argentina. Ya no se ven miles de cuerpos en pleno éxtasis por el título en el Mundial. Tampoco retumban gritos en la madrugada para festejar los goles de un grupo de juveniles, allá a lo lejos, en tierras japonesas. Las luces oscuras se proyectan sobre la vida diaria y las balas de los militares son la música más temida del país. Continue Reading