11 de septiembre de 1973 Tag Archive
Por Santiago Tuñez (@defutbolsomos)
Está solo ahí, en su despacho. Hace rato que el Palacio de la Moneda dejó de ser custodiado por la policía de Carabineros. Suenan disparos de los militares sublevados, pero Salvador Allende resiste el Golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet. Quiere luchar hasta el final en defensa de la constitucionalidad. Toma un teléfono, se comunica con Radio Magallanes y lo enfatiza en su último mensaje. “Tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición”, sostiene el presidente chileno y líder socialista. Punto final para su mandato. Poco después, mientras la Fuerza Aérea lanza cohetes contra la mansión presidencial, se suicida con su fusil, regalo de su amigo Fidel Castro. Continue Reading
Todo está guardado en su memoria
Por Santiago Tuñez
Está solo ahí, en su despacho. Hace rato que el Palacio de la Moneda dejó de ser custodiado por la policía de Carabineros. Suenan disparos de los militares sublevados, pero Salvador Allende resiste el Golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet. Quiere luchar hasta el final en defensa de la constitucionalidad. Toma un teléfono, se comunica con Radio Magallanes y lo enfatiza en su último mensaje. “Tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición», sostiene el presidente chileno y líder socialista. Punto final para su mandato. Poco después, mientras la Fuerza Aérea lanza cohetes contra la mansión presidencial, se suicida con su fusil, regalo de su amigo Fidel Castro. Oscurece en el cielo nublado de Santiago. El dictador Pinochet llega al sillón del poder. Y el cuerpo de un futbolista que entrena con el seleccionado de Chile se llena de silencio. Preocupación. Angustia.
Es Carlos Caszely, el tótem futbolero de Colo Colo en aquellos tiempos. Un rostro cercano a la Unidad Popular y al propio Allende. Lo espera el partido de ida contra Rusia, por el boleto al Mundial de 1974. Nada le importa el destino de la pelota. Camina inquieto por el sonido de las botas militares y los secuestros violentos de los militantes de izquierda. El recuerdo del 11 de septiembre de 1973 queda alojado en su inconsciente. Emerge a cada día. Y a 40 años del Golpe de Estado en Chile, lo cuenta a De Fútbol Somos desde Santiago. “La imagen que tengo de aquel momento es de muchas preguntas y angustia con lo que había pasado. Ese día ocurrieron cosas terribles. Sabía lo que se venía y tenía mucho miedo. No por mí, sino por mis amigos y mi familia. Sabía que estaban en peligro por mis ideas políticas”, expresa en diálogo telefónico.
-¿Esa situación lo llevó a aceptar la oferta del Levante y jugar en la Segunda de España?
–Todos los días había violaciones a los derechos humanos en Chile. Y justo en ese momento, Colo Colo -que venía de ganar el título local y ser subcampeón de la Copa Libertadores– hizo una gira por España. El Levante me ofreció un buen contrato y decidí quedarme en un país que, a diferencia de Chile, vivía la transición de la dictadura de Franco a la democracia. Estaba preocupado por lo que nos pasaba a los chilenos con Pinochet, pero disfrutaba que los españoles pudieran elegir a su presidente. Continue Reading