Santiago Tuñez Author
Palabras mayores (por José Mourinho)
Aquel silencio post goleada 0-5 en el Camp Nou mutó en satisfacción. La conquista de la Copa del Rey, justo contra Barcelona, le dio aire de orgullo a su pecho. Claro, significó su primer éxito como DT de Real Madrid. Y por ese valor, Mourinho se dio el gusto de apuntar a Guardiola y cía. Desde arriba de todos, minimizó la huella del Barça y dejó su frase en el primer lugar de la semana.
No hemos acabado con la hegemonía de Barcelona, porque no la hay. No es el campeón del mundo, ni de Europa».
Como en el 83…
Otra vez, cara a cara. Barcelona y Real Madrid se verán por la final de la Copa del Rey. Será su sexta definición por este título. Y en una de ellas, Diego Maradona estuvo envuelto en la camiseta blaugrana. Fue el 4 de junio de 1983, en un partido de alto voltaje. Con Menotti en el banco catalán y Di Stéfano, en el merengue. Y este duelo, significó uno de los pocos éxitos del Diez en Barcelona. ¿Qué recordó de aquella final? «Arrancamos ganando nosotros, con un gol de Víctor después de un pase mío y nos empató Santillana. El gol del triunfo lo hizo Marcos, mi amigo Marquitos, cuando faltaban diez segundos para terminar. Le demostramos a España -¡y a Núñez!- de lo que éramos capaces».
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Dale, dale aborigen
Ocurrió el 19 de abril de 1940. Aquel día, el Congreso Indigenista Interamericano se reunió en Michoacán. Los principales líderes de las culturas indígenas del continente dijeron presente en el evento. Y en conemoración a ese encuentro, cada año se celebra el Día del Indio Americano. Así lo hicieron hoy las tribus de la región. Y en Paraguay, el festejo incluyó un partido de fútbol. Un grupo de aborígenes de Puente Remanso movió la pelota durante un rato largo. Y al final, el nativo y educador Magdaleno Aponte dejó un mensaje claro: «Nosotros debemos vivir de nuestro trabajo, y no depender del Estado».
El gen merengue
Hay un lugar en España al que miran todos los fánaticos de Real Madrid y Barcelona. Es el estadio de Valencia, donde este miércoles se jugará la final de la Copa del Rey. Será un choque de dos maneras de vivir el fútbol. Y también, de identidades. ¿Cómo definir, en este caso, el gen de los hinchas merengues? Así lo hizo Javier Marías, fanático del Madrid, en su libro Salvajes y Sentimentales: «Sus incondicionales somos capaces de aguantar las derrotas, pero no a un equipo que se parezca a los otros o sea mecánico o albergue temores, porque a estas alturas de la vida las traiciones no se soportan. De la vida propia y de la vida más larga de Real Madrid».
Al fondo de la red (fecha 10)
Dirá la historia que, en la tarde del 16 de abril de 2011, Racing extinguió su mala racha contra Independiente. Basta de lágrimas y frustraciones. Después de cinco años, volvió a festejar en la lección de honor de Avellaneda. Y el principio del carnaval celeste y blanco llegó con el mejor gol de la décima fecha. Justo en el cierre del primer tiempo, el colombiano Teófilo Gutiérrez pinchó la asistencia de Toranzo. Y rápido en su pensamiento, dejó un taco en el área. Su lujo fue facturado al máximo por Gabriel Hauche. Definición al ángulo y goce eterno en el Cilindro. En fin, una perla de puro brillo.
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En su cabeza hay Stoke
Con sólo tres años en la Premier League, Stoke City navega en un momento único. Histórico. La goleada 5 a 0 contra Bolton le firmó el boleto a su primera final de la Copa de Inglaterra. Héroes por un día, sus jugadores atraparon los flashes sobre el césped de Wembley. Fueron retratados en distintos planos. Y en las tribunas, uno de sus hinchas también interesó a los fotógrafos. Se trata de este fanático, cuyo sentimiento por el club de la ciudad de Staffordshire perforó todos los límites. Su amor por el equipo quedó tatuado en la piel. Y en su cabeza, no sólo hay un gol. También hay Stoke…
Pase profundo (por Manuel Vázquez Montalbán)
Catalán de nacimiento y fanático de Barcelona, Manuel Vázquez Montalbán enfocó más allá del giro de una pelota. En distintos artículos, reflexionó sobre el marketing futbolero y analizó las identidades de sus protagonistas. Y en su visión, evaluó a los técnicos. Esos hombres encargados de mover las piezas. Y sobre los que el inolvidable escritor dejó un excelente pase profundo. Bien filoso.
A los entrenadores de fútbol les pasa lo que a muchos críticos literarios o de las artes plásticas: aprenden a leer o a ver una sola vez en la vida».
Cuenta conmigo
Ahí, en el planeta futbolero, es el hombre con la sonrisa más ancha. Su semblante devuelve alegría con la bola en los pies o con un grito de gol. Y en las últimas horas, su eterna satisfacción se potenció fuera de una cancha. En un gesto solidario, Ronaldinho visitó a los heridos de la matanza ocurrida en una escuela de Río de Janeiro. El delantero de Flamengo estuvo con cuatro jóvenes que se recuperan de la masacre protagonizada por un ex alumno del colegio. Los chicos disfrutaron de la visita de Dinho, que les regaló huevos de Pascua y dejó una promesa: entrar con ellos al césped cuando reciban el alta. Un crack.
