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Todos atrás y Cela adelante – DE FÚTBOL SOMOS

Todos atrás y Cela adelante

Literatura hecha pelota

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Por Gabriel Tuñez

“Cela hacía el saque de honor porque acaba de ganar el Nobel y en aquellos días lo hacía todo en España”. El escritor Francisco Umbral, junto a un grupo de colegas, observó desde el palco del estadio Vicente Calderón la simbólica intervención futbolera de Camilo José Cela antes de un partido entre Atlético Madrid y Valladolid. Motivado por aquel puntapié inicial, Umbral escribió “El saque de Cela”, un relato de poco más de dos páginas incluido en el segundo volumen de Cuentos de Fútbol, editado en 1998 y prologado por Jorge Valdano.
Camilo José Cela ganó el Premio Nobel de Literatura en 1989. La Academia sueca decidió reconocerlo por una riquísima obra que incluye 14 novelas, más de 20 libros de cuentos y relatos, otros tantos de poesía, historias de viajes y ensayos. La familia de Pascual Duarte; La colmena, que fue editada en Buenos Aires y prohibida en España durante 12 años; y Mazurca para dos muertos son algunas de sus mejores páginas. En 1963, Cela escribió Once cuentos de fútbol, y en uno de ellos refirió la historia de un equipo tan defensivo que jugaba con dos arqueros: Tiógenes, que atajaba del medio del arco hacia la derecha, y Teogonio, que se ocupaba del lado izquierdo.
Cela nació el 11 de mayo de 1916 en Padrón, una localidad de la provincia gallega de A Coruña y donde en la actualidad habitan poco más de nueve mil personas. “Jugábamos contra portugueses, pero teníamos una consigna clarísima, dictada por un tío mío: no se les ocurra ganar, decía, porque yo no quiero líos con la frontera”, recordó el autor seis décadas después, mientras se acomodaba en el palco oficial del Santiago Bernabeu para observar como invitado de honor un duelo por la vieja Copa de Europa entre Real Madrid y Milan. Su presencia no trajo la suerte que necesitaba el equipo blanco y que, semanas antes, le había dado al Atlético frente al Valladolid. “Los partidos los pierden los jugadores, lo demás son pamplinas”, dijo tajante cuando algún periodista buscó explicaciones lejos del césped, ahí donde las hay tan fácilmente.

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