Apenas le queda un partido en su agenda de la Copa América, nada más. La final de este domingo contra Uruguay. Gerardo Martino prepara ese choque y fantasea con el título. Imposible frenar ese sueño. Más aún, después del duro recorrido para llegar a la definición. Paraguay, se sabe, pasó un parcial difícil ante Venezuela en los penales. Y antes, también aprobado por la misma vía con Brasil. Un triunfo histórico para la albirroja, en el que Martino no dio vueltas en su análisis. Fue un entrenador sincero ante las cámaras y los micrófonos. Pura honestidad brutal, a la hora de protagonizar la mejor frase del torneo.

Ayer justo me quejaba de que yo nunca había tenido culo en mi vida de jugador y de técnico. Bueno, hoy tuve culo. Ganamos con mucho sacrificio, con mucho corazón, con un gran arquero y con mucho culo, para qué negarlo”.